ATENCIÓN, ATENCIÓN ???

¿Qué pasa cuando la atención de nuestros alumnos va y viene como la marea? Pues que muchas veces, muchas, muchas, como maestros preocupados que somos y estamos, valoramos que puede tener un déficit de atención... Elaboramos un protocolo y esperamos pacientemente que la orientadora le evalúe... En algunos casos, en muchos, pasa un curso, dos e incluso tres. Y ahí tenemos a nuestro pequeñ@ con una "semi etiqueta", porque todavía no es "oficial", en su mochila.

Pero hay otras opciones que podemos valorar como maestros, teniendo en cuenta que poseemos una información muy valiosa, ya que conocemos a nuestros alumnos muy bien, pues pasamos con ellos muchas horas.

Esa información viene de casa...¿Qué pasa en casa para que nuestro pequeñ@ no atienda en el cole? No es una pregunta difícil y además ahorra hacer un protocolo, que cada vez son más arduos...

Os pongo en situación: clase de valores, dos clases juntas, dos profes (mi amiga Laura y yo) y comenzamos una dinámica con un cuento bellísimo; OREJAS DE MARIPOSA. Durante la explicación no puedo hablar hay alguien que con su murmullo contagia a todos. Localizo a mi chico y le cojo de la mano con mucho amor, así puedo explicar junto a él mientras está en unan posición "especial", que es estar al lado de la profe. Cuando hablamos del cuento y contamos que Mara es una niña que es insultada por su físico y ponemos un ejemplo mi pequeño ayudante echa una lagrimita, luego dos y tres... ¡¡¡¡Uf algo pasa!!!!

Normalmente es un alumno que realiza "viajes astrales" su cuerpo está en clase, pero su alma a veces sí a veces no. La clase se detiene, y rápidamente mi compañera Laura continúa con la explicación y yo me encargo de la necesidad del pequeño.

Tras unas cuantas preguntas llegamos a lo importante..."mamá trabaja todas las tardes y la echo mucho de menos. La quiero mucho y quiero que esté conmigo"
Claro con esta situación cómo va a atender en clase, es muy difícil. Su alma está con su mamá, y no conoce el camino al cole, así que es normal. Decidimos decirle a mamá lo importante que es para él, tanto es así que la traemos a clase.
Buscamos soluciones y esta es la que se nos ocurre... Escribirle a mamá desde el alma y mostrarle nuestro amor más sincero... ahí va...

No es porque sea de un alumno mío, pero es bello a rabiar...¡Toma regalo que me ha hecho mi chico!